Lesson 5: La Búsqueda de Santidad: 1835-Tiempo Presente

Al finalizar esta lección el estudiante deberá ser capaz de:

(1) Comprender las causas de la pérdida de énfasis en la santidad dentro del movimiento metodista durante el siglo XIX.

(2) Apreciar el hambre de santidad que inspiró el nacimiento de las denominaciones de santidad en el siglo XIX.

(3) Reconocer la importancia del movimiento de campañas en la expansión del mensaje de santidad.

(4) Tomar conciencia de los peligros que conlleva para la iglesia en la actualidad la pérdida de nuestra pasión por la santidad. 

(5) Explicar el nacimiento y el crecimiento del Ejército de Salvación.

(6) Entender que la búsqueda de santidad incluye tanto el amor a Dios como el amor al prójimo.

[1]Una de las creencias centrales de Juan Wesley fue el énfasis en la entera santificación. Wesley predicó que el creyente puede ser hecho puro de corazón, si se rinde a Dios y tiene fe en sus promesas. Predicó que el mandamiento de Jesús en Mateo 5:48 tiene implícita una promesa que puede ser recibida por medio de la fe. A través de los esfuerzos evangelísticos de los hermanos Wesley y de otros predicadores metodistas, este mensaje pronto se extendió por todo el mundo.

Después de la muerte de Francis Asbury en 1816, el Metodismo empezó a experimentar cambios. Estos cambios fueron sutiles, pero eventualmente las iglesias metodistas dejaron de enfatizar la doctrina de la entera santificación. Aunque el Metodismo no negaba la doctrina de la perfección cristiana, pocos pastores la predicaban y pocos laicos la vivían.

Cuatro factores llevaron a los metodistas del siglo XIX a hacer menos énfasis en la doctrina de la entera santificación y en una vida santa y apartada para Dios. Las situaciones que socavaron el mensaje de santidad incluían:

1. Éxito financiero. Para mediados del siglo XIX, muchos metodistas gozaban de estabilidad financiera. Vivían como si no necesitaran depender plenamente de Dios.
2. Respetabilidad. Las iglesias metodistas querían ser respetadas. No alentaban las expresiones emocionales y buscaban ser más sobrias a los ojos de la comunidad.
3. Formación Liberal. En el siglo XIX, muchos pastores y líderes metodistas eran eruditos del liberalismo alemán. Con el énfasis en la alta crítica, las doctrinas básicas de la Biblia parecieron perder importancia. 
4. Pérdida de visión. Al enfrentar conflictos internos, los metodistas empezaron a decaer como movimiento. Nadie parecía capaz de proveer una visión para el futuro del Metodismo.

Además de estas cuatro situaciones, los Estados Unidos estaban enfrentando una guerra civil. Había división entre los estados en relación con varios aspectos, entre ellos los derechos de cada estado y la cuestión de si era permitido que las personas tuvieran esclavos. La Iglesia Metodista Episcopal estaba dividida en cuanto a este tema, y en 1844 esta denominación se dividió en dos iglesias separadas, una en el norte y otra en el sur.

A pesar de estos problemas, el Espíritu de Dios estaba trabajando, como lo hace siempre, en los corazones de hombre y mujeres. Y así, la chispa del movimiento de santidad se encendió. En esta lección vamos a estudiar la búsqueda de santidad entre personas que continuaron buscando un corazón puro, a pesar de las dificultades en el seno de la denominación metodista.

► Comente las cuatro razones por las que decayó el énfasis en la doctrina de la entera santificación y la vida de santidad entre los metodistas del siglo XIX. Considere lo siguiente:

• ¿Cuáles de estas situaciones están presentes en su sociedad?
• ¿Cómo han afectado estas situaciones a la iglesia y su énfasis en una vida santa?

[1] El material de esta lección fue desarrollado por el Rev. Robert Booth, editor de la revista God’s Missionary Standard.

Desarrollo Inicial

El 21 de mayo de 1835, en la ciudad de Nueva York, Sarah Lankford dio testimonio de un corazón puro. Lankford había estado organizando reuniones de oración en dos iglesias metodistas de Nueva York. En agosto de 1835 trasladó estas reuniones a su propia casa.

Estas reuniones de oración se llegaron a conocer como las Reuniones de los Martes para la Promoción de la Santidad en la Ciudad de Nueva York. En 1837, en una de estas reuniones, la hermana de Sarah, Phoebe Palmer, dio testimonio de una experiencia de entera santificación.

Phoebe Palmer y su esposo Walter, que era médico, pronto asumieron el liderazgo de estas reuniones a las que asistían cientos de personas que anhelaban una vida santa. Las Reuniones de los Martes se convirtieron en la mayor inspiración para la expansión del mensaje de santidad a mediados del siglo XIX.

En julio de 1839, el Reverendo Timothy Merritt comenzó a publicar una revista titulada Guide to Christian Perfection (Guía para la Perfección Cristiana). En el editorial, Merritt expuso el propósito de la revista. Planteó la pregunta, “¿Qué Hay que Hacer para Revivir la Obra de Santidad en la Iglesia?”

La Guía para la Perfección Cristiana se convirtió en un importante catalizador en la expansión del mensaje de santidad a lo largo de los Estados Unidos. En esta publicación mensual, Merritt incluía testimonios de experiencias de entera santificación, tenía autores invitados que escribían artículos sobre el mensaje de santidad, y anunciaba la ubicación de eventos de santidad. Era una revista de santidad diseñada para promover el mensaje de santidad.

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Phoebe Palmer representa varias tendencias evangélicas del siglo XIX: una mayor participación de las mujeres en el ministerio, el énfasis metodista en la perfección cristiana, la pasión por el evangelismo y la preocupación por las necesidades sociales.

Aunque las Reuniones de los Martes para la Promoción de la Santidad fueron iniciadas por mujeres, en poco tiempo algunos hombres empezaron a asistir. Alrededor de 300 personas asistían a cada reunión. Cientos de ministros metodistas dieron testimonio de la entera santificación.

En 1842, Palmer publicó El Camino de Santidad, que hacía énfasis en una segunda obra instantánea de gracia. También trabajó como editora de un periódico, Guide to Holiness (Guía para la Santidad), publicado por su esposo, Walter Palmer. Predicó en campañas y reuniones de avivamiento en los Estados Unidos y en Gran Bretaña. Alrededor de 25,000 personas se convirtieron bajo su ministerio.

Aunque Palmer es recordada principalmente por su enseñanza sobre la santidad, también tenía gran pasión por la obra social y el alcance evangelístico. Entre otras cosas, Phoebe Palmer:

• Ayudó a fundar la primera misión urbana permanente en los Estados Unidos, en el barrio marginal conocido como Five Points, en Nueva York.
• Participó en ministerios en las prisiones.
• Apoyó la primera misión metodista a China.
• Trató de establecer una misión a Palestina.
• Organizó la Asociación de Damas Cristianas, organización predecesora de la YWCA (Asociación Cristiana de Mujeres Jóvenes).

Palmer influenció a otros reformadores sociales como William y Catherine Booth. Fue a través de la influencia de Palmer que Catherine Booth empezó a predicar junto a su esposo William. En su libro, The Promise of the Father (La Promesa del Padre), Phoebe Palmer afirmaba que las mujeres debían involucrarse en el ministerio junto con los hombres. Este libro y sus conversaciones con Phoebe Palmer impulsaron a Catherine Booth a participar en el ministerio.

Los predicadores de santidad creían que el mensaje de la entera santificación promovía el evangelismo hacia los perdidos y el servicio a los necesitados. Creían que una persona que testifica del amor perfecto es sensible a todas las áreas de necesidad humana.

[1] Image: "Mrs. Phoebe Palmer", The Life and letters of Mrs. Phoebe Palmer (1881), retrieved from https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Mrs._Phoebe_Palmer.jpg, public domain.

Formación de la Iglesia Metodista Wesleyana

En 1833, Orange Scott, un leñador que se convirtió y se volvió evangelista y pastor metodista, enfrentó un momento decisivo en su vida. Conversando con un colega pastor, Scott tomó conciencia de que su iglesia estaba ignorando el pecado de la esclavitud en los Estados Unidos. Se dio cuenta de que la iglesia metodista había comprometido sus convicciones en torno a este tema, a pesar de que el fundador del Metodismo, Juan Wesley, se había opuesto abiertamente a la esclavitud.

Scott comenzó a leer sobre el movimiento abolicionista. Adquirió suscripciones al Libertador, un periódico abolicionista editado por William Lloyd Garrison, y las envió a cien pastores metodistas en Nueva Inglaterra. Otros pastores se unieron a Scott en su protesta contra la iglesia metodista en cuanto al tema de la esclavitud.

Los obispos de la iglesia metodista no tardaron en acusar a Scott de mentir. Su obispo le dio dos alternativas – podía oponerse a la esclavitud o podía seguir siendo un anciano de la iglesia metodista; no podía hacer las dos cosas.

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Orange Scott estaba convencido de que un corazón santo debe evidenciarse en una vida santa y que los creyentes santificados deben procurar poner fin a los males de la sociedad. El 8 de noviembre de 1842, él y otros dos ministros se retiraron de la Iglesia Metodista Episcopal.

Durante los años siguientes, Scott publicó un periódico llamado The True Wesleyan (El Verdadero Wesleyano). El 31 de mayo de 1843, Scott presidió una convención reunida en Utica, Nueva York, para establecer una nueva denominación llamada Conexión Metodista Wesleyana.

Scott murió en 1847 a la edad de 47 años. Su desafío final fue, “Que todos nuestros ministerios y nuestra gente mantengan la unidad del espíritu en el vínculo de la perfección, y no hay nada que temer.”

Formación de la Iglesia Metodista Libre

Entre 1835 y 1858 crecieron las tensiones dentro de la iglesia metodista en torno al tema de la santidad. Hasta 1858, los esfuerzos se habían concentrado en su mayoría en reformar la iglesia metodista. En 1859, el enfoque tomó un rumbo diferente.

El Reverendo Benjamin Titus Roberts era un prominente pastor en la iglesia metodista. Él y otros pastores empezaron a protestar contra lo que llamaban los “Metodistas de la Nueva Escuela.” Estaban preocupados por varias tendencias que observaban en la iglesia metodista:

• La tendencia a negar la importancia de la entera santificación. Muchos pastores metodistas trataban la justificación y la entera santificación como una misma experiencia.
• El deseo de tener iglesias ostentosas y una adoración formal, en vez de la simplicidad que había caracterizado a los primeros metodistas.
• El deseo de éxito financiero. El alquiler de bancas a miembros de la iglesia demostraba el favoritismo hacia los ricos.
• La negativa a confrontar el pecado de la esclavitud.

En respuesta a estas situaciones, en 1860 se estableció la Iglesia Metodista Libre en Pekin, Nueva York. Algunas de sus creencias esenciales eran:

1. Libertad del pecado. Creían y enseñaban la santidad y la separación del mundo.
2. Libertad de la esclavitud. Creían que todas las personas debían ser tratadas como iguales y que nadie debía ser esclavizado.
3. Libertad del secretismo. Prohibían a sus miembros unirse a grupos secretos como la Logia de los Masones.
4. Libertad del poder político dentro de la iglesia. Creían que la iglesia metodista había abandonado sus raíces y que estaba controlando la forma como las iglesias locales debían operar.
5. Libertad de la adoración litúrgica. Creían que la adoración no debía ser tan formal como se había tornado en la iglesia metodista, por lo que promovieron una adoración libre de liturgia.

Estas cinco creencias fueron del agrado de muchos y la Iglesia Metodista Libre pronto se extendió más allá de Nueva York. Esta denominación contribuyó en gran medida a la expansión del mensaje de santidad.

El Mensaje de Santidad en Revistas y Libros

Además de revistas influyentes, como la Guía para la Santidad y El Verdadero Wesleyano, se publicaron muchos libros sobre la santidad durante el siglo XIX. En 1851, Randolph Foster escribió Nature and Blessedness of Christian Purity (Naturaleza y Bienaventuranza de la Pureza Cristiana). Cinco años más tarde, Jesse Peck escribió The Central Idea of Christian Perfection (La Idea Central de la Perfección Cristiana). Estos libros enseñaban que cada creyente ha sido llamado a vivir una vida santa.

Un educador y predicador congregacional llamado Thomas Upham asistió, a petición de su esposa, a una de las reuniones de Phoebe Palmer en la ciudad de Nueva York. A través de las Reuniones de los Martes, Upham dio testimonio de una consagración más profunda y empezó a enseñar el mensaje de santidad. Empezó a escribir artículos en la revisa de los Palmer, Guía para la Santidad.

Upham era un pensador profundo y atraía a personas con un mayor nivel de educación que estaban interesadas en una vida santa. Su libro titulado Principles of the Interior or Hidden Life: Designed Particularly for the Consideration of Those Who Are Seeking Assurance of Faith and Perfect Love (Principios de la Vida Interior u Oculta: Diseñado Especialmente para Aquellos que Están Buscando la Seguridad de Fe y el Amor Perfecto) fue ampliamente aceptado.

Otro pastor que asistió a las Reuniones de los Martes fue un predicador presbiterano llamado William Boardman. En 1858, Boardman escribió un libro titulado The Higher Christian Life (La Vida Cristiana Superior), basado en sus experiencias personales y sus anhelos por un Cristianismo más profundo. Boardman no era un erudito, pero este libro apelaba al lector común y se popularizó en Estados Unidos, Canadá e Inglaterra.

Muchos de los primeros escritores de las revistas y libros de santidad fueron influenciados directamente por las Reuniones de los Martes. Hombres como Thomas Upham, Matthew Simpson y John Inskip asistieron a estas reuniones y experimentaron la obra de la entera santificación. Estos y otros hombres llevaron el mensaje de santidad de vuelta a sus iglesias.

En la década de 1850, los Palmer decidieron llevar la enseñanza de las Reuniones de los Martes a audiencias más grandes. William y Phoebe Palmer empezaron a viajar como evangelistas, predicando en campañas y reuniones de avivamiento sobre la belleza de la santidad y la vida santa. En 1857 fueron a Canadá y realizaron una serie de campañas que ayudaron a extender el mensaje de santidad en esa nación.

[1]Un corazón santo debe evidenciarse en una vida santa.

En 1861 estalló la Guerra Civil en los Estados Unidos. Esto desaceleró la expansión del avivamiento de santidad, pero no lo detuvo. Walter y Phoebe Palmer pasaron gran parte de este período en Inglaterra y Escocia. Los libros de William Boardman y Thomas Upham habían sido ampliamente aceptados en Inglaterra y prepararon el camino para los Palmer. Durante estos años, Phoebe Palmer conoció a William y Catherine Booth, fundadores del Ejército de Salvación. El Ejército de Salvación inició oficialmente en 1865 y con el tiempo llegó a ser conocido en todo el mundo. Palmer tuvo una valiosa influencia en los líderes de esta organización evangelística.

El Avivamiento de Santidad de 1867

John Inskip fue un pastor metodista educado en la Universidad de Dickinson, en Pennsylvania. Desde que era estudiante en Dickinson, Inskip se interesó en la doctrina de la santidad, pero pensaba que muchos de los que buscaban la entera santificación sólo deseaban una experiencia emocional superficial.

En 1864 la esposa de Inskip, Martha, asistió a una campaña en Sing Sing, Nueva York. Asistió con el propósito específico de llenar una continua hambre espiritual. En la campaña experimentó la gracia de la entera santificación. Regresó a su casa y le contó a su esposo sobre su experiencia. Nueve días después, mientras predicaba un sermón sobre la necesidad de santidad, John mismo fue santificado.

Poco tiempo después, Inskip asistió a una Reunión de los Martes para la Promoción de la Santidad e invitó a los Palmer a realizar unas reuniones especiales en su iglesia para enseñar y predicar la santidad. Luego John dirigió una serie de reuniones de avivamiento.

En 1866, el predicador de santidad J.A. Wood y la señora Harriet Drake empezaron a conversar sobre la manera de extender el mensaje de santidad. La señora Drake ofreció pagar la mitad de los costos para organizar una campaña que se concentrara el mensaje de santidad.

La Campaña Nacional para la Promoción de la Santidad fue organizada y planificada para realizarse en Vineland, Nueva Jersey. Los críticos menospreciaron los planes y afirmaron que fracasarían. La campaña comenzó el 17 de Julio de 1867 y asistieron cerca de 10,000 personas. Al finalizar la campaña, se tomó la decisión de crear una organización llamada Asociación Nacional de Campañas para la Promoción de la Santidad. El Reverendo John Inskip fue elegido como primer presidente de la asociación.

Esta organización decidió realizar la siguiente campaña en Pennsylvania, entre un grupo de personas de habla alemana, con el fin de alcanzarlos con el mensaje de santidad. El 14 de julio de 1868, la Asociación Nacional de Campañas para la Promoción de la Santidad inauguró su campaña en Manheim, Pennsylvania. El servicio de la noche tuvo una asistencia de 10,000 a 15,000 personas. Esta multitud creció hasta alcanzar 25,000 personas antes del cierre de la campaña. Entre los predicadores estaban John S. Inskip, Alfred Cookman, J.A. Wood, William McDonald, George Hughes, Phoebe Palmer y Matthew Simpson.

George Hughes describió un sermón de Matthew Simpson: “Sus manos estaban levantadas. Su voz resonaba poderosamente en el aire y se mezclaba con el sonido de llantos y gemidos. Parecía que Matthew Simpson literalmente había bajado el poder. Como el sonido de muchas aguas, los ‘¡Aleluyas!’ resonaban en el bosque que servía de templo. Cuántos saltaron a la corriente purificadora esa noche, nunca lo sabremos”.

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Al cierre de la campaña, William McDonald le recordó a la multitud que “en casa no sería igual que en Manheim.” Apelando a la tolerancia e incluso a la compasión por aquellos que no habían experimentado la plena salvación, pidió a su audiencia evitar las controversias y practicar una austeridad extrema, y señaló que la profesión de santidad debía reflejarse en humildad. En conclusión, afirmó que “en el ejercicio de sus deberes religiosos, no sean gobernados por las emociones, sino por la fe.”

La Asociación Nacional de Campañas para la Promoción de la Santidad siguió realizando campañas en diferentes lugares de los Estados Unidos. Miles asistían a estas campañas, incluyendo personas de Canadá, India, Inglaterra, Alemania y otros países europeos.

La Creación del Ejército de Salvación

William Booth se convirtió durante una predicación de James Caughey, un ministro metodista estadounidense. Cuando Walter y Phoebe Palmer viajaron a Inglaterra, influenciaron a William y Catherine Booth. Los Booth se comprometieron con el mensaje de santidad.

Los Booth escucharon el llamado de Dios para alcanzar a los grupos marginados por la sociedad en el este de Londres. Ellos creían que el evangelio debía atender las necesidades espirituales y físicas de los pobres. En 1865, William y Catherine Booth fundaron la Asociación de Avivamiento Cristiano, que más tarde se llamó Misión Cristiana del Este de Londres.

Después de predicar al aire libre durante casi dos años, en 1867 los Booth adquirieron un edificio en mal estado y lo convirtieron en el Salón de la Misión del Pueblo, con el doble propósito de evangelizar y proveer ayuda social.

Al cabo de pocos años, la misión llegó a ser conocida como el Ejército de Salvación y empezó a usar terminología militar. Sus miembros formaron unidades misioneras llamadas “Cuerpos.” Los miembros del Ejército de Salvación usaban uniformes y tenían rangos desde cadetes hasta generales. Catherine Booth diseñó la primera bandera del Ejército de Salvación. Para finales de 1878, el Ejército de Salvación tenía 127 “oficiales.” De éstos, 101 se habían convertido en las reuniones del Ejército de Salvación.

El Ejército de Salvación era conocido en Londres por el evangelismo y el ministerio social. Sus miembros creían que el evangelio debía traer a los pobres a Jesús – y que el evangelio debía aliviar la pobreza del pueblo que era liberado de la atadura del alcoholismo y el pecado.

Los Booth dependían de donaciones y otra ayuda humanitaria para el ministerio del Ejército de Salvación. En 1890, Booth escribió La Oscura Inglaterra y Cómo Salir de Ella para dar a conocer la obra del Ejército de Salvación. Este libro generó gran atención sobre William y Catherine Booth y el Ejército de Salvación.

[1]Descripciones de la Campaña de Manheim “Un estallido simultáneo de agonía y de gloria se escuchó en todas partes de la congregación; y por casi una hora, no se podía describir la escena.” - Rev. John Inskip  “La escena iba más allá de toda descripción. Era una de las manifestaciones más poderosas del poder divino que hemos visto jamás. Varios miles de personas estaban postradas bajo la poderosa influencia de este poder sobrenatural.”
- Periódico Lancaster Daily Express

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William Booth nació en la pobreza. Su padre murió cuando él tenía trece años, dejando a su familia en una terrible situación financiera. Siendo adolescente, trabajó en una casa de empeños en Nottingham, Inglaterra, para ayudar a su familia. Cuando tenía quince años, Booth se convirtió cuando iba camino a su casa después de asistir a un servicio en la Capilla de Wesley. Poco después de su conversión dio testimonio de un corazón puro, luego de escuchar una predicación del evangelista James Caughey. Dos años más tarde, William Booth empezó a predicar.

Booth empezó a predicar a los marginados y los pobres de Nottingham. Un día llevó a un grupo de niños pobres de las calles a una iglesia metodista. El predicador se enojó con Booth por llevarlos a la iglesia. El fundador del Metodismo, Juan Wesley, había sido expulsado de varias iglesias anglicanas por llevar mineros pobres a la iglesia. Ahora, predicadores metodistas de clase alta estaban rechazando a los pobres en las iglesias metodistas.

Al cabo de pocos años, Dios llevó a William Booth a Londres con la misión de llevar avivamiento a una de las grandes ciudades del siglo XIX. En 1865, Booth empezó a predicar en una carpa en los barrios bajos. Entonces afirmó que por fin estaba haciendo lo que Dios lo había llamado a hacer. Pronto pasó a usar un edificio abandonado al que llamó Misión Cristiana del Este de Londres.

Booth predicaba dondequiera que la gente escuchara. Sus oyentes a menudo eran abrumados por un sentir de la presencia y el poder de Dios. Para 1879, a través de la predicación de 127 oficiales, el Ejército de Salvación estaba realizando 75,000 servicios al año. En 1880, el Ejército se expandió a los Estados Unidos de América. En 1881, fueron a Francia y un año después enviaron obreros a la India.

El Ejército de Salvación inicio con predicación; sin embargo, también se dio a conocer por atender las necesidades materiales de los pobres. Para 1887, el Ejército de Salvación era conocido por llenar tres necesidades esenciales: “sopa, jabón y salvación.” Booth reconocía que el entorno físico y social de los pobres hacía extremadamente difícil para ellos apreciar el mensaje de salvación y santidad. Empezó a trabajar para atender las necesidades sociales y así abrir camino para el evangelio.

El libro de Booth, La Oscura Inglaterra y Cómo Salir de Ella, proponía formas de acabar con la pobreza en Inglaterra. Booth mostraba que Inglaterra estaba dividida entre ricos y pobres. Creía que esta división dañaba a la nación tanto espiritual como económicamente. Este libro fue un éxito de ventas y le mostró a Inglaterra cómo enfrentar los problemas sociales. Las ideas de Booth funcionaban cuando eran aplicadas. Miles de personas salieron de la pobreza a través del trabajo del Ejército de Salvación.

Catherine, la esposa de Booth, fue tan importante para el Ejército de Salvación como su esposo. Ella trabajó tan incansablemente como él. Su encanto ayudó a ganar el apoyo de la clase alta. Cuando murió, en 1890, las calles de Londres se inundaron con una procesión fúnebre que se extendió más de cuatro millas. Durante veinticinco años, William y Catherine trabajaron juntos en el Ejército de Salvación. Para 1890, el Ejército contaba con 2,900 centros en treinta y cuatro países.

Cerca del final de su vida, el General Booth fue elogiado por hombres como Charles Spurgeon, Winston Churchill y el Cardenal Manning. El Príncipe de Gales dio su respaldo al Ejército de Salvación; y cuando el Príncipe fue coronado como Eduardo VII en 1902, Booth fue invitado a la coronación.

A pesar de su fama, el General Booth nunca perdió su pasión por el evangelismo. Durante una visita al Palacio de Buckingham, el rey le preguntó a Booth qué hacía para recrearse. Booth respondió, “Señor, algunos hombres tienen una pasión por el arte, la fama y el oro. Yo tengo una pasión por las almas.” En una ocasión, a causa del peso de la preocupación por los perdidos, exclamó, “Oh Dios, ¿qué puedo decir? ¡Almas! ¡Almas! ¡Almas! ¡Mi corazón anhela ganar almas!”

Cuando le preguntaron cuál era el secreto de su éxito, William Booth respondió:

“Les diré el secreto. Dios tiene el todo de mí. Ha habido hombres con cerebros más brillantes, hombres con mayores oportunidades. Pero desde el día en que Dios puso a los pobres de Londres en mi corazón y recibí una visión de todo lo que Jesucristo podía hacer con ellos, ese día decidí que Dios tendría todo lo que William Booth era. Y si hay algo de poder en el Ejército de Salvación hoy, es porque Dios ha tenido toda la adoración de mi corazón, todo el poder de mi voluntad, y toda la influencia de mi vida.”

Se estima que Booth viajó 5 millones de millas y predicó 60,000 sermones. El constante clamor de William Booth era “¡Vayan por las almas, y vayan por las peores!” Dios en verdad tenía el todo de William Booth.

[1] Image: "Mme Catherine Booth, Mme William Booth" by Elliott & Fry - Catholic University of Leuven, Belgium, retrieved from https://www.europeana.eu/en/item/2024903/photography_ProvidedCHO_KU_Leuven_9983097240101488, public domain.

El Ejército de Salvación y el Mensaje de Santidad

En 1877, William Booth dijo, “La santidad al Señor es para nosotros una verdad fundamental; es un pilar de nuestra doctrina.” Más tarde Booth, dirigiéndose a sus soldados, escribió: “Déjeme preguntarles, ¿quién los salvó? El Dios Viviente, y él los santificará… Él lo hará”. El General Booth estaba comprometido con el mensaje de santidad.

Desde el inicio, el Ejército de Salvación estaba basado en las enseñanzas y los principios de santidad. Oficiales del Ejército de Salvación como el Brigadier General Samuel Logan Brengle, predicaron en campañas y reuniones de avivamiento de la Asociación Nacional de Campañas para la Promoción de la Santidad. Brengle escribió muchos libros sobre la santidad que todavía se publican hoy.

Al igual que Orange Scott, William y Catherine Booth creían que el resultado de un corazón santo era una vida santa y que los creyentes santificados debían buscar poner fin a los males de la sociedad. Este deseo llevó a los Booth a las partes más oscuras de Inglaterra. Establecieron albergues y hogares para rehabilitar prostitutas, y combatieron el abuso del alcohol.

Por supuesto, no todos estaban contentos con los Booth y el Ejército de Salvación. Los Booth atrajeron oponentes por varias razones. Algunos los atacaban por usar mujeres para predicar. Otros se burlaban de ellos por su predicación al aire libre. Algunos decían que la música de sus bandas era demasiado ruidosa. Con frecuencia les lanzaban comida podrida. Algunos trataban de interrumpir sus reuniones. Sin embargo, a pesar de la oposición, ganaron el respaldo de muchos. En una ocasión Charles Spurgeon escribió que “cinco mil policías no podrían llenar el lugar del Ejército de Salvación en la represión del crimen y el desorden.” El Ejército de Salvación transformó comunidades enteras con el poder del evangelio.

En el norte de Inglaterra, un adinerado hombre de negocios llamado Frank Crossley conoció a los Booth y los invitó a realizar reuniones en su casa. Con el fin de promover el mensaje de santidad, Crossley compró un viejo salón de música en una zona pobre de Manchester, el Starr Hall, y lo transformó en una misión. Durante muchos años, el Starr Hall fue un centro para la expansión del mensaje de santidad en Manchester, Inglaterra.

Eventualmente, el Ejército de Salvación comenzó a enviar bandas y contingentes a otros países. Actualmente hay más de 15,000 contingentes en 126 países.

► William Booth insistía en que el evangelio debía responder a las necesidades tanto espirituales como materiales. Algunos cristianos han predicado un mensaje espiritual ignorando las necesidades materiales; otros han buscado llenar las necesidades materiales, pero han fallado en proclamar el mensaje de salvación. ¿Atiende su iglesia ambas necesidades? Si su iglesia está fallando en una de estas áreas, comente qué puede hacer para lograr un mejor balance de ambos aspectos.

Otros Grupos de Santidad en Europa

A finales del siglo XIX y principios del siglo XX, otros grupos de santidad surgieron en Inglaterra y se extendieron por toda Europa. Reader Harris fue uno de los primeros asistentes a la Convención de Starr Hall, patrocinada por Frank Crossley. Harris decidió trabajar con las iglesias existentes en lugar de iniciar su propia iglesia. Fundó la Liga Pentecostal de Oración, que motivaba a los creyentes de todas las denominaciones a buscar un corazón puro. La Liga Pentecostal de Oración llegó a tener 13,000 miembros.

David Thomas fue parte de la Liga Pentecostal de Oración. El temía que algunos creyentes que habían sido enteramente santificados a través del ministerio de la Liga Pentecostal de Oración volverían a sus iglesias locales y en poco tiempo perderían su fervor. En respuesta a esta preocupación, fundó la Misión Internacional de Santidad. Estableció veinte misiones en Inglaterra. Uno de sus convertidos llevó el mensaje a Suráfrica y estableció una misión allá.

Algún tiempo después, Maynard James empezó a asistir a una de las misiones de la Misión Internacional de Santidad y fue enteramente santificado. James y su iglesia Calvary Holiness promovieron el ministerio de predicadores de santidad como Norman Grubb, Leonard Ravenhill y Duncan Campbell. Trabajó en varias ocasiones con la Iglesia del Nazareno, una denominación de santidad de la cual hablaremos en breve. James también participó con la Banda Evangelística Africana, una organización interdenominacional de santidad.

Además de la predicación de los Palmer y los Booth, un tercer matrimonio formado por Robert Pearsall y Hannah Whitall Smith predicó la santidad a finales del siglo XIX. Sus convenciones fueron conocidas con el nombre de Movimiento de Keswick.

Los Smith eran un matrimonio cuáquero de Filadelfia, Pennsylvania. Se convirtieron en prominentes predicadores del mensaje de santidad en los Estados Unidos e Inglaterra. Hannah experimentó la entera santificación después de asistir a una reunión de oración de mujeres metodistas. Cuando Robert vio el cambio en la vida de Hannah, comenzó a buscar la misma experiencia con Dios. En 1867, dio testimonio de la entera santificación en la campaña de Vineland.

En 1874 los Smith viajaron a Inglaterra para predicar en convenciones de santidad. Se hicieron populares entre los aristócratas ingleses y en las universidades. Su enseñanza llegó a ser conocida como la “Vida Superior” o el Movimiento de Keswick.

Desde Inglaterra, los Smith viajaron a Europa continental y predicaron en Francia, Alemania y Suiza. El mensaje de santidad atrajo a los pietistas alemanes y fue ampliamente aceptado entre ellos. Robert Smith predicó el mensaje de santidad en las iglesias luteranas y reformadas, donde muchos creyentes dieron testimonio de un corazón puro.

Uno de los grupos alemanes que surgió de las reuniones de avivamiento de los Smith se llamó Gemeinschaftsbewegung (Movimiento de Comunidad). Este grupo de santidad alemán tenía tres énfasis principales: comunión entre los cristianos, evangelismo y la promoción de la doctrina de la santidad.

Después de que los Smith regresaron de Europa continental, organizaron la Convención de Brighton en Inglaterra. Similar en estilo a las Reuniones de la Campaña Nacional, esta convención reunió a más de 8,000 personas. El movimiento de la Vida Superior atrajo a predicadores como J. Hudson Taylor, D.L. Moody, Evan Hopkins, Charles Cullis y muchos otros. Los Smith y sus asociados también motivaron a grupos como el Ejército de Salvación y la Liga Pentecostal a seguir proclamando el mensaje de santidad.

La Fundación de la Iglesia del Nazareno

A inicios del siglo XX, era evidente que los predicadores de santidad habían fracasado en sus intentos de reformar la Iglesia Metodista en los Estados Unidos. Como consecuencia, los líderes del movimiento de santidad empezaron a fundar denominaciones aparte de la Iglesia Metodista.

En octubre de 1895, Phineas Bresee y unas cien personas más fundaron la Iglesia del Nazareno en Los Ángeles, California. Ellos creían que la entera santificación se recibe por la fe en Cristo. Predicaban que los cristianos santificados deben seguir el ejemplo de Cristo y predicar a los pobres.

En 1907, la Asociación de Iglesias Pentecostales de América y la Iglesia del Nazareno formaron una asociación. Se unieron en 1908 bajo el nombre de Iglesia Pentecostal del Nazareno. Pocos años después, la denominación eliminó la palabra Pentecostal y es conocida actualmente como la Iglesia del Nazareno. Hoy en día los nazarenos tienen alrededor de 30,000 iglesias y más de dos millones de miembros alrededor del mundo.

[1] El inicio del siglo XX fue una época turbulenta para el Metodismo, pues los wesleyanos enfrentaron ataques por parte del liberalismo alemán. Muchos de los metodistas británicos aceptaron las enseñanzas del modernismo, mientras que en los Estados Unidos muchos metodistas buscaron restaurar la vitalidad del Metodismo histórico.

Buscando regresar a sus raíces de santidad, la Iglesia Pilgrim Holiness y la Iglesia del Nazareno se separaron de la Iglesia Metodista. A principios del siglo XX, una nueva Asociación Nacional de Santidad retornó a los énfasis metodistas tradicionales del avivamiento y la santidad cristiana.

Mientras que la denominación metodista siguió a otras denominaciones tradicionales hacia el liberalismo y la decadencia, los defensores de la santidad formaron nuevas congregaciones para preservar los valores representados en los inicios del avivamiento metodista. Las iglesias de santidad enviaron misioneros, establecieron periódicos y casas de publicaciones, y fundaron institutos bíblicos para capacitar pastores y obreros cristianos.

A lo largo del siglo XX, muchas otras iglesias de santidad han continuado proclamando el mensaje predicado por los hermanos Wesley – la posibilidad de un corazón puro y lleno de un amor perfecto hacia Dios y hacia nuestro prójimo. Han seguido proclamando que el llamado de Jesús a ser “perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto” lleva implícita la promesa de que Dios nos hará santos a medida que lo buscamos en fe.

En la actualidad, como en los inicios del movimiento metodista, surgen conflictos entre el deseo de relevancia cultural y las demandas de la verdad bíblica. Tanto en los Estados Unidos como en otros países, los metodistas deben aprender a replantear su mensaje histórico en función de las necesidades del mundo actual. El mensaje de que todos los hombres necesitan ser salvos; todos los hombres pueden ser salvos; todos los hombres pueden saber si son salvos; y todos los hombres pueden ser completamente salvos es tan necesario hoy como lo fue en el siglo XVIII. Hoy en día los metodistas siguen ofreciendo un mensaje de esperanza en Cristo a nuestro mundo.

[1] Adaptado de William Snider, “Paper on Twentieth Century Methodism” (Ensayo sobre el Metodismo en el Siglo XX).

Juan Wesley definió la “Perfección Cristiana” como un amor perfecto hacia Dios y un amor perfecto hacia el prójimo. Wesley entendió que el estándar de Dios en 1 Pedro 1:15-16 y en Mateo 5:48 no es la perfección absoluta de Dios, ni la perfección de los ángeles, o la perfección de Adán antes de la Caída. Ser “perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto”[1] significa amar como Dios ama.

Este estándar de perfección se evidencia en el ministerio de Juan y Carlos Wesley. Ellos amaban a Dios verdaderamente, y buscaron vivir vidas prudentes y disciplinadas que reflejaran ese amor. Se comprometieron a servir a Dios y viajaron incesantemente para predicar su Palabra.

Los hermanos Wesley amaban a Dios y a su prójimo. Entregaron sus vidas a servir a los que estaban sufriendo. Carlos pasaba noches enteras con prisioneros condenados que estaban por enfrentar la horca. Juan combatió los males sociales que habían creado una clase social que jamás podría salir de la pobreza. Una de las últimas cartas de Juan animaba a William Wilberforce a continuar la batalla contra la esclavitud. Los hermanos Wesley creían y practicaban la santidad; amaban a Dios y amaban a su prójimo.

Phoebe Palmer fue otra predicadora de la santidad que entendió que la santidad significa amar a Dios y amar al prójimo. La señora Palmer era apasionada en su búsqueda de una vida santa. También tenía el compromiso de atender las necesidades de los pobres en lugares como los barrios bajos de la ciudad de Nueva York, las prisiones, y otros lugares donde había personas sufriendo. Phoebe Palmer creía y practicaba la santidad; amaba a Dios y amaba a su prójimo.

William y Catherine Booth amaban a Dios. Construyeron una organización tan disciplinada en su búsqueda de Dios, que podía ser llamada un “ejército.” También amaban a sus prójimos. Los Booth no podían aceptar un evangelio que prometía un cielo futuro, pero ignoraba el sufrimiento en este mundo. Ellos siempre tenían presente la primera declaración pública de Jesús.

“El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos.”[2]

► Los miembros del movimiento de santidad eran conocidos por su amor a Dios y su amor hacia el prójimo. Cuando las personas piensan en su iglesia, ¿piensan en una iglesia que ama a Dios y a las personas? ¿De qué modo pueden comunicar que aman al mundo que los rodea?

[1] Mateo 5:48.

[2] Lucas 4:18.

Muchas cosas han cambiado desde el avivamiento de santidad del siglo XIX. Algunas organizaciones que fueron proponentes iniciales de la doctrina de santidad ya no existen. El movimiento de santidad ha experimentado problemas y divisiones.

No obstante, a pesar de las dificultades, hoy más que nunca hay grupos que proclaman el mensaje de santidad. Aunque algunos de los primeros grupos de santidad han abandonado la búsqueda de una vida santa, otras denominaciones de santidad continúan proclamando la posibilidad de un corazón puro y de la victoria sobre el pecado deliberado.

Parece haber un nuevo despertar en el seno de muchas iglesias hacia el llamado a la santidad. Hay un deseo de ser como Jesús y de experimentar su poder habitando en nosotros. Hay un deseo de buscar una doctrina de la santidad formulada con claridad y honestidad. Es bueno recordar hoy el mensaje Orange Scott, fundador de la Iglesia Metodista Wesleyana: un corazón santo debe evidenciarse en una vida santa.

William (1829-1912) y Catherine Booth (1829-1890): Fundadores del Ejército de Salvación, organización de santidad dedicada a servir a los pobres.

Phineas Bresee (1838-1915): Ayudó a fundar la Iglesia del Nazareno junto con C.W. Ruth y otros.

John Inskip (1816-1883): Predicador metodista y Capellán del Ejército del Norte durante la Guerra Civil. Fue el primer presidente de la Asociación Nacional de Campañas para la Promoción de la Santidad. Esta organización ayudó a promover el mensaje de santidad a finales del siglo XIX.

Timothy Merritt (1775-1845): Pastor metodista que fundó la revista Guide to Christian Perfection (Guía para la Perfección Cristiana). Posteriormente los Palmer compraron esta revista y le cambiaron el nombre a Guide to Holiness (Guía para la Santidad).

Phoebe Palmer (1807-1874): Considerada como la madre del Movimiento de Santidad. Ejerció una gran influencia a través de las Reuniones de los Martes para la Promoción de la Santidad, la revista Guide to Holiness y sus libros. Animó a las mujeres a participar en el ministerio público y tuvo gran influencia en el ministerio de Catherine Booth y Hannah Whitall Smith.

Benjamin Titus Roberts (1823-1893): Fundador de la Iglesia Metodista Libre. Se opuso al formalismo de la Iglesia Metodista Episcopal, e inició una iglesia que predicó la doctrina de la santidad y que aún existe en la actualidad.

Orange Scott (1800-1847): Jugó un papel decisivo en la fundación de la Conexión Metodista Wesleyana, la cual se convirtió en la Iglesia Metodista Wesleyana. Se sintió indignado por la falta de énfasis en la santidad y por la tolerancia de la esclavitud en la Iglesia Metodista.

Robert (1827-1898) y Hannah Whitall Smith (1832-1911): Ayudaron a promover el mensaje del Movimiento de la Vida Superior en Europa. Este fue conocido con el nombre de Movimiento de Keswick. Hannah es reconocida por su libro El Secreto del Cristiano para una Vida Feliz.

1. Haga el examen correspondiente a esta lección. El examen incluye fechas de los “Eventos Clave en la Historia de la Iglesia” (1837-1908).

2. Prepare un resumen biográfico de uno de los siguientes líderes cristianos: Phoebe Palmer, William Booth o Johan Inskip. Su resumen debe incluir tres partes:

• Biografía: ¿Cuándo vivió? ¿Dónde vivió? ¿Dónde y cuándo murió?
• Eventos: ¿Cuáles son los eventos más importantes de su vida?
• Influencia: ¿Cuál ha sido su influencia en la iglesia cristiana?
• Aplicación: ¿Cuál lección para la iglesia actual encontramos en la vida de este líder?

Tiene dos opciones para presentar este resumen:

• Entregue un documento de dos páginas a su líder de grupo.
• Haga una presentación oral de 3-5 ante su grupo.

1. Mencione los cuatro factores que llevaron a los metodistas del siglo XIX a hacer menos énfasis en la doctrina de la entera santificación.

2. Sarah Lankford y su hermana __________________ dirigieron las Reuniones de los Martes para la Promoción de la Santidad.

3. El fundador de la Iglesia Metodista Wesleyana fue ______________________. Él fue inspirado a empezar esta iglesia por la convicción de que un corazón santo debe evidenciarse en una vida santa.

4. La Iglesia Metodista Libre creía en

• Libertad del ___________
• Libertad de la ___________
• Libertad del secretismo
• Libertad del ___________________ dentro de la iglesia
• Libertad de la ____________________ litúrgica

5. ___________________ fue el primer presidente de la Asociación Nacional de Campañas para la Promoción de la Santidad.

6. _______________________________ fundaron el Ejército de Salvación, organización comprometida con el evangelismo, el mensaje de santidad y la atención de las necesidades de los pobres.       

7. Robert Pearsall y Hannah Whitall Smith establecieron convenciones de santidad en Inglaterra que llegaron a conocerse como _________________________.

8. Phineas _______________ ayudó a organizar la Iglesia del Nazareno.